‘PROU BÉ’ se estrena mundialmente en el Festival Internacional de Cine Fantástico de Cataluña – Sitges Film Festival
PROU BÉ es seleccionado en la sección oficial Festival de Cine Fantástico de Sitges
PROU BÉ, dirigido y escrito por Anna Carbonell, ha sido seleccionado en la Sección Oficial del Festival Internacional de Cine Fantástico de Cataluña – Sitges Film Festival, uno de los festivales más importantes del cine de género a nivel mundial.
Este reconocimiento coloca a la producción independiente de Sin Parpadear en un escaparate internacional, celebrando historias distintas y originales nacidas de nuevas voces del sector, y será el mejor de los escenarios para poder hacer su estreno mundial.
La película narra una entrevista laboral que rápidamente se convierte en una experiencia asfixiante y surrealista. Mireia y Laia, finalistas para un mismo puesto, se enfrentan a Eugeni, un entrevistador que lleva el proceso de selección hasta un límite inesperado. Lo que comienza como una situación cotidiana se transforma en un thriller psicológico con toques de comedia negra, explorando la tensión, la manipulación y la competitividad del mundo laboral moderno. A través de la exageración y el surrealismo, la película plantea una crítica mordaz a la precariedad laboral y a los dilemas éticos contemporáneos, convirtiendo un conflicto universal en una experiencia cinematográfica intensa y provocadora.
Para Sin Parpadear, este paso representa mucho más que un logro: es la confirmación de que las historias independientes, nacidas con recursos propios y con una visión clara, pueden competir y brillar en escenarios internacionales.
PROU BÉ demuestra que la creatividad y la valentía narrativa pueden abrir puertas en festivales de prestigio y conectar con audiencias que buscan cine arriesgado y original.
La edición de este año del Sitges Film Festival, que se celebrará en octubre, reunirá a cineastas, profesionales de la industria y amantes del cine fantástico de todo el mundo. La inclusión de PROU BÉ en la Sección Oficial no solo es un reconocimiento al talento de Anna Carbonell y al equipo de Sin Parpadear, sino también un impulso para seguir apostando por proyectos que desafíen los géneros y las convenciones narrativas, llevando al público a experiencias cinematográficas únicas.